Para los amantes de la gastronomía, uno de los mejores modos de sumergirse en la cultura de un país es a través de sus platos callejeros. Y en el caso de Corea, hay un abanico de opciones impresionantes para seleccionar. Ya sea que prefieras algo salado o dulce, picante o suave, la comida callejera coreana ofrece delicias para todo tipo de gustos. En este artículo, te presentamos 10 comidas callejeras coreanas que, sin duda, querrás repetir.
El Tteokbokki es una delicia callejera sumamente popular en Corea, y por buenas razones. Estos pasteles de arroz con forma cilíndrica están bañados en una salsa roja picante a base de gochujang (pasta de chile coreana) y se acompañan con tortas de pescado, huevos cocidos y cebollín. La textura elástica de los pasteles de arroz junto con la salsa picante crea una combinación celestial. De hecho, este platillo ha logrado reconocimiento internacional, con un chef de un restaurante con estrella Michelin en Italia manifestando su admiración por su exquisito sabor.
El Hotteok es un panqueque dulce relleno de azúcar morena, miel y cacahuates troceados. La masa, hecha a base de harina de trigo y levadura, se fríe hasta obtener un tono dorado. El relleno en su interior es meloso y caliente, convirtiéndolo en el alimento reconfortante ideal para los días fríos de invierno.
El Gimbap es la versión coreana de los rollos de sushi, pero con un giro distintivo. En lugar de llevar pescado crudo, están rellenos de una variedad de ingredientes cocidos como verduras aderezadas, huevos y jamón. El arroz lleva un toque de aceite de sésamo y sal y se envuelve en láminas de alga nori seca. Es una opción perfecta para quienes buscan una comida ligera o un tentempié. Si te encuentras en el Mercado Gwangjang en Seúl, no puedes dejar de probar el "kimbap adictivo". Su nombre no sugiere que contenga sustancias adictivas, sino que su sabor es tan irresistible que te atrapará desde el primer bocado. Este kimbap, de tamaño reducido, es enormemente sabroso, sobre todo si se acompaña con salsa de wasabi.
Japchae es un plato tradicional que combina fideos de cristal salteados con una variedad de verduras, como zanahorias, espinacas y champiñones. Los fideos poseen una textura elástica y las verduras aportan un toque crujiente refrescante. Es una deliciosa opción vegetariana repleta de sabor. Si tienes la oportunidad de visitar el Mercado Internacional de Busan, no dejes de degustar el Bibim dangmyeon, una variante del Japchae que integra aceite de sésamo, gochujang, espinacas, cebollinos, zanahorias, oden y rábano encurtido cortado finamente. Esta versión presenta un sabor distintivo en comparación con el Japchae tradicional y es una experiencia culinaria que no te puedes perder. Su sabor te sorprenderá gratamente.
El Mandu se refiere a los dumplings coreanos rellenos de una mezcla de carne, verduras y tofu. Se cocinan hervidos o al vapor y se suelen acompañar con una salsa a base de salsa de soja y vinagre. Constituyen una opción deliciosa y práctica para una comida al paso.
Dakkochi son populares brochetas de pollo que se asan a la parrilla y se bañan en una tentadora salsa picante elaborada a partir de gochujang y miel. Es una elección predilecta para aquellos amantes de los sabores intensos y picantes, y es perfecta para quienes buscan una opción rica en proteínas.
Odeng es otra típica brocheta de torta de pescado que se suele encontrar en los mercadillos callejeros de Corea. Aunque similar al eomuk, el odeng se diferencia en que la torta de pescado se corta en piezas más pequeñas y se presenta en una brocheta, acompañada de una salsa picante a base de gochujang y salsa de soja.
El Bungeo-ppang es un delicioso pastelillo con forma de pez que guarda en su interior un dulce relleno de pasta de judías rojas. Su masa, hecha de harina de trigo y levadura, se cocina en moldes con forma de pez hasta que adquiere un dorado perfecto. Es especialmente popular en Corea durante la temporada invernal. Aunque el relleno tradicional es de judías rojas, también se pueden encontrar versiones con crema pastelera y queso crema, permitiendo que cada persona personalice su Bungeo-ppang según sus gustos.
El Pajeon es una tortita salada preparada con una masa que combina harina, huevos y cebolla verde. Se fríe hasta alcanzar un tono dorado y una textura crujiente, y se suele acompañar de una salsa a base de salsa de soja, vinagre y aceite de sésamo. Es un manjar que los coreanos suelen degustar junto con makgeolli, un tradicional vino de arroz, en días lluviosos. Si tienes la suerte de encontrarte en Corea en un día de lluvia, te recomendamos probar esta combinación y sumergirte en la atmósfera romántica y melancólica que los coreanos asocian con este plato.
El Sundae es una apreciada comida callejera en Corea, consistente en intestinos de cerdo rellenos con una mezcla de ingredientes como fideos de camote, carne y verduras. Se sirve generalmente al vapor o a la parrilla y es común acompañarlo con una salsa picante. Esta salchicha de sangre, con su textura masticable y su profundo sabor, es una delicia que conquista tanto a locales como a turistas.
Estas 10 irresistibles comidas callejeras coreanas son esenciales para todo aquel que visite Corea. Desde platos salados como el gimbap y el tteokbokki hasta golosinas dulces como el hotteok, la comida callejera coreana tiene propuestas para todos los gustos. Así que, cuando te encuentres en Corea, no dejes de pasar por el mercado callejero más cercano y sumergirte en estos sabores inigualables.
¡Espero que hayas disfrutado leyendo sobre estas 10 maravillosas comidas callejeras coreanas tanto como yo disfruté compartiéndolas contigo! Y si te sientes indeciso con tantas opciones deliciosas, déjame facilitarte la elección recomendándote mis 5 favoritos personales.
En primer lugar, está el Tteokbokki, un plato de pastelitos de arroz especiados y masticables, una verdadera delicia para los amantes de la comida callejera. El Sundae, con su combinación única de sangre de cerdo y fideos de camote, es otra opción que no puedes dejar pasar. Si te apetece algo crujiente, los Twigim son tu mejor opción, siendo aperitivos fritos disponibles en una amplia variedad de sabores.
Si buscas algo más ligero y refrescante, las brochetas de pastel de pescado, Odeng, son una excelente elección. Y, por último, pero no por ello menos delicioso, te recomiendo encarecidamente el Hotteok, un panqueque dulce relleno de canela, azúcar moreno y frutos secos.
Confía en mí, ninguna de estas opciones te decepcionará. ¡Buen provecho!